Fotos: Iñaki Vergara
El octavo y último encierro de Sanfermin 2017 discurría con bastante normalidad, cierta tranquilidad y mucha velocidad. Los toros de Miura habían atropellado a varios mozos en Mercaderes y Estafeta, aunque sin demasiadas consecuencias. Pero el gran lío llegó en el tramo de Telefónica, junto al vallado derecho.
Varios corredores habían encarado la curva desde Estafeta por la parte derecha, pero los toros también la tomaron por allí y su gran velocidad hizo que varios de ellos trataran de encaramarse al vallado. Sin embargo, la violencia con la que llegaron los astados no les permitió conseguirlo y varios de ellos fueron arrollados. Primero, por el toro negro que abría la manada, después por el que le seguía y luego el resto. Uno de los mozos fue levantado por los aires, otro resultó violentamente golpeado en la cabeza con el cuerno.
Aunque por unos momentos se temió que todo pudiera terminar en una escabechina, no se produjeron heridos por asta, aunque según las primeras valoraciones del Complejo Hospitalario de Navarra se produjeron varios traumatismos, alguno de ellos que podría revestir gravedad.
