“No me despeines” de Milagros Arizcuren Balda ha sido la mejor historia de las presentadas al XIV Certamen Internacional de Microrrelatos de San Fermín según el jurado. Es un microrrelato costumbrista sanferminero con un final atronador que sin duda ha encandilado -como a la gente de sanfermin.com- a los miembros del jurado para proclamarlo ganador. Ellos ha sido, los escritores Idoia Saralegui y Miguel Izu y José Antonio Arrieta, de Arpa Abogados – Consultores. La obra ganadora ha sido gratificada con premio de 1.000 euros. El acto se ha celebrado en el Condestable y ha sido patrocinado por Laboral Kutxa.
El certamen se confirma en el tiempo con 478 microrrelatos presentados desde 24 países diferentes, aunque con mayoría de participación Navarra. Hay relatos en diferentes lenguas y los podrán ir conociendo en la web de blogsanfermin.com. En el certamen txiki se han recibido 24 propuestas.
El segundo premio ha sido para “Por fin conozco a mi nieta”, de Josu Álvarez de Eulate Navarlaz y, el tercero, para “Picarona”, de Carmen Remírez Barragán. Ambos autores han recibido, además del reconocimiento, una gratificación de 250 y 100 euros respectivamente. Esta es la gala completa donde han intervenido diferentes personas relacionadas con el entorno sanferminero.
El jurado ha destacado, en boca de Miguel Izu, que el certamen ya forma parte de la «tradición sanferminera» además de ganar un importante «peso literario». Izu ha relatado que en los años anteriores se tuvieron que reunir con mascarillas para deliberar. Esta vez fue a cara descubierta, en la peña Anaitasuna, y ha señalado que las cervezas que se tomaron no influyeron en el resultado.
Izu ha destacado que el jurado coincidió bastante en la selección y ha recordado que la selección es a ciegas y estaba agradecido al saber lo ganadores de no encontrar ni familiares ni amigos.
Desde la organización no esperaban que en 14 años de certamen solo hubieran discurrido doce fiestas, pero así ha sido, y la manera de contribuir fue no detenerse y mantener el espíritu sanferminero.
MICRORRELATO GANADOR: «NO ME DESPEINES»
¡Qué orgulloso iba! Llevaba a su hija a hombros, con el vestido blanco y un pañuelo rojo al cuello. La niña le enredaba los rizos con sus manos y él le decía “no me despeines y agárrate fuerte para no caerte”. Iban por la calle disfrutando del ambiente, la música, la gente que iba y venía de un lado a otro. Al cruzarse con la vendedora de globos cedió a los deseos de su hija y un poco más adelante le compró también una pulsera de colorines. Con las manos ocupadas la niña seguía revolviendo los rizos de su cabeza y él le insistía “no me despeines y agárrate fuerte para no caerte”. Recorrieron las calles en busca de los gigantes, se emocionaron con sus bailes y escaparon de Caravinagre antes de que les atizase. Después en las barracas se montaron en los caballitos y la niña comió el barquillo del vino dulce. Al atardecer, cuando estaban en la plaza del ayuntamiento su hija propuso ir a ver el encierrillo y le dio un beso mientras revolvía los escasos pelos de su cabeza. Él le contestó “no me despeines y agarra fuerte la silla de ruedas para que no me caiga por la cuesta”.
Al evento han asistido numerosos escritores que aguardaban con atención la resolución del concurso. Para ello han tenido que esperar a que se leyeran algunos relatos representativos del propio concurso como el de Imanol González, que leyó Saray Matías (de la agencia Villa McLujan); el de Javier Sánchez, al que puso voz Tito Elizalde (de la Churrería de la Mañueta –reciente pancarta de Oro de la peña Anaitasuna-); el de Leyre Retegi, que entonó Mikel Sanz (de Laboral Kutxa); el de Federico García Fernández que leyó Rubén Astráin (corredor del encierro); el microrrelato de Juana Maria Idarreta, al que puso voz Paula Díaz (de la agencia Lemon Milk), la historia de Jesús Gueia, que entonó Sonia Ibañez (de Grupo 5); de Ignacio Navarro, que leyó Ana Azagra; Así, hasta que pudimos escuchar a los propios autores leer la tercera (Carmen Remírez) y segunda obras clasificadas (Josu Álvarez de Eulate). Mariano Pascal fue el encargado de dirigir el acto y también el elegido de para terminar la faena leyendo la obra ganadora.
